Si están buscando una opción deliciosa y ligera para disfrutar en una cena en familia o con amigos, no hay nada como una buena sopa. Pero no cualquier sopa, sino una sopa de tomate y albahaca con croutons. Este plato es una mezcla perfecta de sabores y texturas que seguramente los sorprenderá y los deleitará.
Ingredientes necesarios
Antes de empezar con la elaboración de la sopa, es esencial tener a mano todos los ingredientes necesarios. Para esta receta necesitarán:
- 1 kg de tomates maduros
- 4 dientes de ajo
- 1 cebolla grande
- Un manojo de albahaca fresca
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
- 1 litro de caldo de verduras
- 200 g de pan viejo para hacer los croutons
- Aceite de oliva extra virgen para los croutons
- 2 dientes de ajo para los croutons
Recuerden que siempre es mejor utilizar ingredientes frescos y de buena calidad, ya que esto influirá en el sabor y resultado final del plato.
Paso a paso para la preparación de la sopa
Preparar esta deliciosa sopa no es tan complicado como puede parecer. Siguiendo estos pasos podrán disfrutar de un plato sabroso y nutritivo.
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Lo primero que deben hacer es lavar bien los tomates y cortarlos en cuartos. Pelar la cebolla y los ajos y picarlos en trozos pequeños.
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En una olla grande, calentar las dos cucharadas de aceite de oliva y añadir la cebolla y los ajos. Cocinar a fuego medio hasta que estén dorados.
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Añadir los tomates a la olla y cocinar durante unos 10 minutos, hasta que estén suaves.
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Agregar el caldo de verduras y llevar a ebullición. Reducir el fuego y dejar cocinar durante unos 20 minutos.
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Mientras la sopa se cocina, es el momento de preparar los croutons. Para ello, deben cortar el pan en cubos pequeños y colocarlos en una bandeja de horno. Rociar con un poco de aceite de oliva y espolvorear con ajo picado. Hornear a 180 °C durante unos 10 minutos, o hasta que estén dorados.
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Cuando la sopa esté lista, añadir un puñado de hojas de albahaca fresca y triturar todo con una batidora hasta obtener una consistencia cremosa. Si prefieren una sopa con más textura, pueden triturar solo la mitad y dejar el resto tal cual.
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Por último, sazonar la sopa con sal y pimienta al gusto.
La sopa se sirve caliente, acompañada de los croutons que han preparado. Pueden añadir unas hojas de albahaca fresca por encima para darle un toque colorido y aromático.
Beneficios de la sopa de tomate y albahaca
Además de ser deliciosa, la sopa de tomate y albahaca tiene varios beneficios para la salud. Los tomates contienen licopeno, un potente antioxidante que puede ayudar a prevenir varias enfermedades. También son ricos en vitamina C, que es esencial para un sistema inmunológico saludable.
Por su parte, la albahaca también tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, y se ha demostrado que puede tener efectos beneficiosos sobre el sistema inmunológico y la salud cardiovascular.
Además, los croutons aportan un toque crujiente que contrasta con la cremosidad de la sopa, y también aportan hidratos de carbono y fibra, que son esenciales para una dieta equilibrada.
Opciones de personalización para la sopa
Una de las grandes ventajas de esta receta es que pueden personalizarla según sus gustos o necesidades. Por ejemplo, si prefieren una sopa más ligera, pueden reducir la cantidad de aceite. Si son vegetarianos o veganos, pueden utilizar caldo de verduras en lugar de caldo de carne.
También pueden añadir otros ingredientes para variar el sabor. Por ejemplo, pueden añadir un poco de pimentón para darle un toque picante, o un poco de queso rallado por encima antes de servir para darle un extra de cremosidad.
Maridaje perfecto para la sopa de tomate y albahaca
Para acompañar esta deliciosa sopa, una excelente opción es un vino blanco fresco y afrutado, como un Chardonnay o un Sauvignon Blanc. Estos vinos complementan perfectamente los sabores del tomate y la albahaca, y ayudan a realzar el sabor del plato.
Otra opción puede ser un vino rosado, que también combina muy bien con los sabores de esta sopa. Si prefieren una opción sin alcohol, un agua infusionada con frutas o una limonada casera también pueden ser excelentes opciones.
Esperamos que disfruten preparando y degustando esta deliciosa sopa de tomate y albahaca con croutons. ¡Buen provecho!
Cómo almacenar y recalentar la sopa de tomate y albahaca
Si han hecho un poco más de sopa de tomate y albahaca de la que pueden consumir en una sola comida, no se preocupen. Esta sopa se puede guardar y recalentar perfectamente, lo que la convierte en una excelente opción para preparar con antelación y disfrutar durante la semana.
Para almacenar la sopa, permitan que se enfríe completamente antes de transferirla a un recipiente hermético. Se puede guardar en el refrigerador hasta por una semana. Si desean almacenarla por un período de tiempo más largo, también pueden congelarla. En este caso, asegúrense de dejar un poco de espacio en el recipiente, ya que la sopa se expandirá al congelarse.
Para recalentar la sopa, simplemente colóquenla en una olla y caliéntenla a fuego medio, revolviendo ocasionalmente, hasta que esté bien caliente. Si han congelado la sopa, será mejor que la descongelen en el refrigerador durante la noche antes de recalentarla. Recuerden, los croutons deben ser añadidos al momento de servir para que mantengan su textura crujiente.
La historia de la sopa de tomate y albahaca
Mientras disfrutan de su deliciosa y nutritiva sopa de tomate y albahaca, pueden deleitar a sus comensales con la interesante historia de este plato. Aunque la sopa de tomate es una receta clásica en muchas cocinas alrededor del mundo, la combinación de tomate y albahaca es una característica distintiva de la cocina italiana.
La albahaca, que es nativa de la India y otras regiones tropicales de Asia, ha sido cultivada y valorada por sus propiedades culinarias y medicinales durante más de 5.000 años. Fue introducida en Europa por los antiguos romanos y se ha utilizado en la cocina italiana desde la Edad Media.
Por otro lado, los tomates son originarios de América del Sur y fueron llevados a Europa por los exploradores españoles en el siglo XVI. Aunque al principio fueron considerados venenosos y se cultivaban principalmente como plantas ornamentales, finalmente se ganaron un lugar en la cocina italiana y hoy en día son un ingrediente imprescindible en muchas recetas tradicionales, incluyendo la sopa de tomate y albahaca.
Conclusión
La sopa de tomate y albahaca con croutons es una receta sencilla y deliciosa que seguro se convertirá en una de sus favoritas. Además de ser nutritiva y sabrosa, esta sopa puede personalizarse a sus gustos y necesidades, y se puede guardar y recalentar sin problemas.
No importa si la hacen para disfrutar en una cena en familia, para llevar como almuerzo al trabajo o para deleitar a sus invitados en una cena especial, esta sopa siempre será una excelente opción. Así que no esperen más, reúnan los ingredientes y preparen esta deliciosa sopa de tomate y albahaca. ¡Les aseguramos que no se arrepentirán!
